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Desgarrador video: de rodillas ante el jurado popular, una madre rogó perpetua
Marina Chavez pidió justicia por su hijo Santiago, asesinado en 2020 durante un partido de fútbol en el barrio Comercial de la ciudad de Córdoba.
Marina Chavez pidió justicia por su hijo Santiago, asesinado en 2020 durante un partido de fútbol en el barrio Comercial de la ciudad de Córdoba.
La madre de Santiago Orellano, un joven asesinado durante un torneo interbarrial de fútbol en 2020, suplicó ante el tribunal y el jurado popular que les dieran cadena perpetua a los acusados.
Marina Chávez pidió de rodillas justicia por su hijo de 18 años a quien fusilaron el sábado 22 de agosto de 2020 en una chancha del barrio Comercial en la ciudad de Córdoba.
Todo ocurrió mientras se disputaba un partido entre los equipos Comercial y Ampliación Vicor. Comenzaron los incidentes y siguió una batalla campal que incluyó disparos.
El joven que había ido a ver el “picado” de fútbol, cayó impactado por una bala en su cabeza. Mientras agonizaba, le robaron sus pertenencias y murió en el Hospital de Urgencias.
“Lo único que le voy a pedir es que le den la mayor cantidad de años, perpetua para este homicida, animal”, imploró Chávez entre lágrimas y de rodillas.
Y agregó: “A mí también me mató, a mí me costó volver a respirar, no tengo fuerzas para vivir”.
Este viernes, el tribunal integrado por jurados populares, determinó que Franco Daniel Tapia (28), fue autor del disparo que mató al joven el 22 de agosto de 2020 en barrio Comercial y lo condenó a prisión perpetua.
https://www.youtube.com/watch?v=XK6EUGNfl6I&feature=emb_imp_woyt
El hombre no solo asesinó a Orellano, sino que además le robó el celular y la billetera mientras agonizaba. Al hacer uso de la palabra, pidió disculpas a la familia y dijo: “Es un error que cometí”.
Por otra parte, también condenaron a Ramón Mariano Rodríguez (35) a seis años de cárcel por los delitos de “abuso de arma reiterado y coacción calificada reiterada”.
La investigación estableció que Rodríguez disparó contra Marcos Nehemías Alfonzo, un amigo de Orellano que sobrevivió al ataque. Para él, la fiscalía había pedido ocho años de cárcel.
“Santiago era un ser hermoso por dentro y por fuera, era un gigante chiquito” recordó profundamente conmovida la madre durante el juicio.