
Espectáculos
Murió René Bertrand, el hijo de María Rosa Fugazot, a los 53 años
El actor se encontraba transitando una grave enfermedad. Su madre le confirmó la noticia al periodista Fede Flowers.
El actor se encontraba transitando una grave enfermedad. Su madre le confirmó la noticia al periodista Fede Flowers.

Este jueves, el mundo teatral argentino sufrió una pérdida inesperada y desgarradora: René Bertrand, actor de destacada trayectoria e hijo de la reconocida actriz María Rosa Fugazot, falleció a los 53 años. La noticia, recibida con profunda consternación, conmocionó tanto a colegas como a seguidores que admiraban su talento y calidez.
Bertrand, quien llevaba décadas construyendo su reputación en escenarios porteños, había brillado en obras emblemáticas como “La mujer del panadero” y “Cartas de amor”. Su presencia sobre las tablas se caracterizó por esa mezcla única de sensibilidad y compromiso, un sello que lo acompañó desde sus inicios y que, sin dudas, marcó a toda una generación de elencos y directores.

Según fuentes cercanas, el actor atravesaba una dura enfermedad y un virus habría acelerado este fatídico desenlace. Sin embargo, se desconocen los detalles de esta precipitada despedida, que se llevó a cabo con discreción y el respeto que todo artista merece.
"Dolor inmenso: acabo de hablar con María Rosa Fugazot y me confirmó el fallecimiento de su hijo René Bertrand", publicó en las redes el periodista Fede Flowers confirmando así el abrupto final del hijo de Fugazot y el recordado César Bertrand.

Por su parte, Gustavo Sofovich, hijo de Gerardo Sofovich e íntimo amigo de René, lo despidió en sus redes sociales con un emotivo posteo en el que incluyó una vieja foto de Bertrand y su padre. Y sobre ella escribió: "Buen viaje hermano. Volá alto. Nunca te vamos a olvidar".

Los testimonios de quienes lo conocieron coincidieron en una idea: Bertrand fue un actor que construyó su carrera desde la humildad y la pasión por el teatro nacional. No buscó estridencias, y prefirió a lo largo de los años transmitir su compromiso ante cada personaje con autenticidad.
Mientras tanto, las redes sociales y los portales culturales se llenaron de emotivos mensajes: “Gracias por tanto, René”, “Inolvidable presencia”, “Tu sombra quedó en nuestro escenario”.
En resumen, la muerte de René Bertrand sacudió el corazón del teatro argentino. Fue esa noticia triste, al mismo tiempo, el puntapié para un reconocimiento que ya empezó a gestarse. Atrás quedó una vida dedicada a la actuación con compromiso, carácter y sencillez, y delante, un legado que permanecerá en cada obra, cada personaje y cada recuerdo.