Curiosidades
La actitud positiva no lo es todo: expertos revelan el rasgo más vinculado a la longevidad
Más que la positividad, los hábitos integrales, la resiliencia ante el estrés y rasgos como la disciplina están detrás de una vejez sana y duradera
Más que la positividad, los hábitos integrales, la resiliencia ante el estrés y rasgos como la disciplina están detrás de una vejez sana y duradera
La cantidad de estadounidenses que llegan a los 100 años o más se ha duplicado en la última década, de acuerdo a las estadísticas. Si bien muchos de ellos atribuyen su extensa longevidad, al menos parcialmente, a una perspectiva positiva de la vida, expertos señalan que la relación entre personalidad y envejecimiento es más compleja.
Rasgos de carácter como la escrupulosidad inciden en una extensa longevidad. (Imagen ilustrativa Infobae)
La amabilidad también se relaciona con la longevidad, sobre todo ante situaciones estresantes. Las personas psicológicamente sanas se recuperan más rápido del estrés. “Pueden relativizar los problemas y volver más fácilmente a su equilibrio”, agrega el experto a CNBC.
Más que la actitud, los hábitos saludables alargan la vida. (Imagen ilustrativa Infobae)
Una combinación de hábitos saludables, capacidad de recuperación y rasgos de personalidad como la escrupulosidad y amabilidad, están detrás de una vida más duradera y plena. La actitud positiva por sí sola no garantiza longevidad, pero forma parte de un estilo de vida integral para envejecer bien.
La longevidad parece tener también un componente genético importante. “Además de la actitud y conducta, la mayoría de los longevos tienen padres y abuelos longevos. Esto, evidentemente, sugiere que hay una genética asociada a la epigenética en esto”, expresó a Infobae Oscar Cingolani, científico de Johns Hopkins en Estados Unidos.
Es decir, la posibilidad de vivir muchos años se hereda en cierta medida. Quienes provienen de familias con integrantes de avanzada edad tienen más probabilidades genéticas de alcanzar ellos mismos una edad similar. Sin embargo, la genética no lo determina todo, ya que el estilo de vida y otros factores ambientales también influyen en la longevidad de una persona. Pero la predisposición genética juega un papel relevante en combinación con otros elementos.
Escrupulosidad
La escrupulosidad es un rasgo de personalidad que se refiere a cuán organizada, disciplinada y responsable es una persona. Las personas con alta escrupulosidad suelen ser muy cuidadosas, perseverantes, prudentes y orientadas a las normas.
Algunas características de las personas escrupulosas son:
- Son muy organizadas y les gusta tener todo planeado. Hacen listas y cronogramas para sus tareas y actividades.
- Se esfuerzan por cumplir sus obligaciones y compromisos. Son confiables y responsables.
- Siguen normas y estándares rigurosamente. Les importa hacer las cosas “bien” y correctamente.
- Son cuidadosas en sus decisiones. Analizan pros y contras antes de actuar.
- Evitan comportamientos riesgosos o actos imprudentes.
- Muestran autodisciplina y automotivación para completar tareas.
- Son persistentes en alcanzar sus metas. No se rinden fácilmente.
Se podría describir como el rasgo de ser extremadamente cuidadoso, confiable y enfocado en hacer las cosas correctamente. Esta cualidad está estrechamente relacionada con el éxito académico y laboral.
Opy Morales para Infobae