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Fotomultas: instalan los primeros 50 radares en las zonas con más siniestros
Tal como ha ocurrido en otras ciudades, se espera un pico de infracciones en la primera etapa.
Tal como ha ocurrido en otras ciudades, se espera un pico de infracciones en la primera etapa.
En los puntos de mayor siniestralidad en Mar del Plata, como la costa y distintas avenidas, avanza día a día la instalación de los primeros 50 radares que, antes de que termine el invierno, estarían operativos para comenzar a detectar tecnológicamente infracciones de tránsito como el exceso de velocidad, el cruce de semáforos rojo y la invasión de la senda peatonal.
La implementación del sistema de fotomultas fue anunciada hace casi un mes atrás por el intendente Guillermo Montenegro, quien tomó la decisión de instrumentar lo establecido en el convenio firmado el año pasado con la Universidad de San Martín, pese al rechazo del Concejo Deliberante.
El pasado 6 se junio se inició un “período de prueba” de “60 y 90 días” que está en marcha actualmente. En este período viene avanzando en la instalación de los primeros dispositivos en zonas estratégicas y determinadas por un “mapa de calor” que establece cuáles son los puntos que mayor cantidad de siniestros registran en el partido de General Pueyrredon.
Mapa de calor del Observatorio de Seguridad Vial, una herramienta clave para determinar la ubicación de los dispositivos.
En total, se prevé distribuir unos 240 radares en diferentes sectores, aunque solo el 20% de los mismos estarían operativos para detectar infracciones dentro de este período de prueba.
A lo largo del mes de junio y el inicio de julio, según confiaron fuentes municipales a LA CAPITAL, se estuvieron colocando los primeros radares.
Algunos prácticamente no demandan obras y se instalan rápidamente, mientras que otros requieren interferencia de servicios públicos, por lo que las cuadrillas del Municipio trabajan articuladamente con operarios de empresas como Camuzzi y EDEA.
Dentro de este primer conjunto de 50 equipos, algunos ya están correctamente instalados, listos para funcionar. Otros aún no fueron conectados. Y un tercer conjunto de puntos designados ya tienen los trabajos preliminares completados y resta colocar los dispositivo.
Los dispositivos están divididos en dos modalidades: por un lado, los cinemómetros detectarán infracciones por exceder la velocidad máxima permitida (60 kilómetros por hora en avenidas, 40 km/h en calles, 30 km/h en zonas que así lo indican y 20 km/h en cercanías de escuelas), por otro, los equipos semafóricos controlarán el cruce de semáforos en rojo y la invasión de la línea de frenado y la senda peatonal.
Se multiplicará la cantidad de cinemómetros para monitorear la velocidad máxima.
Las primeras multas
Mientras se avanza la instalación, en las próximas semanas el Municipio anunciará formalmente a partir de cuándo se “encenderán” los dispositivos y el sistema de fotomultas comenzará a regir. Se estima, según los plazos previstos, que las primeras multas con esta tecnología se harían antes de que termine el invierno.
Una vez que los equipos estén operativos, su tecnología podrá detectar infracciones como el exceso de velocidad, el cruce de semáforos y la invasión de la línea de frenado y la senda peatonal.
Al detectarse una infracción, la misma se procesará y el acta, con la constatación, se enviará el domicilio del titular del vehículo registrado por el radar.
Los dispositivos, cabe señalar, se encuentran “parametrizados con mucha claridad” para evitar errores frente a situaciones dudosas, como el cruce de un semáforo justo en el momento que cambia a rojo o superar por muy poco el límite velocidad, y determinar tecnológicamente la infracción.
Señalización y adaptación
Dentro de este período de prueba que se extendería durante los meses de julio y agosto, de acuerdo a lo establecido en el convenio, el Municipio deberá difundir la ubicación exacta de los dispositivos y señalizar los puntos en los que habrá radares.
Deberá haber una campaña de concientización tendiente a informar a la población que los conductores comiencen a “adaptarse” a esta nueva dinámica de circulación vehicular en las calles de Mar del Plata, con las misma normativa de tránsito, aunque con mayor control a través de la tecnología.
Pico de infracciones
En base a la experiencia de otras ciudades que también incorporaron un sistema de fotomultas en busca de ordenar el tránsito, se espera que en una primera etapa, posiblemente desde la primavera y hasta el verano o incluso después de la temporada, haya un “pico” de infracciones en Mar del Plata.
En la mayoría de las localidades que sumaron este tipo de tecnología, es casi un denominador común que exista un período inicial con fuerte cantidad de infracciones detectadas por los dispositivos, seguido, comúnmente, de una meseta y una posterior reducción en el número de multas en una segunda y tercera etapa.
Por sobre todas las cosas, desde el Municipio subrayan una premisa esencial: si se conduce bien, no debería haber multas.
Bajar la siniestralidad
El objetivo central con el que el gobierno municipal decidió avanzar en la implementación de un sistema de fotomultas apunta a reducir la siniestralidad en las calles del partido de General Pueyrredon.
Dentro del Ejecutivo hay “muy buenas expectativas” de que esta herramienta resulte efectiva para disminuir notablemente la cantidad de siniestros viales, sobre todo aquellos de mayor gravedad y en las zonas que registran mayor número de choques.
En ese sentido, el intendente Guillermo Montenegro sostiene cada vez que le consultan sobre el tema que en Mar del Plata “se maneja mal” y que las fotomultas “no tienen un fin recaudatorio”, sino que son “una herramienta más para cuidar la vida de los vecinos”.
Hasta $123.400 por cruzar en rojo o exceder la velocidad
Los valores de las multas, según lo establecido en la Ley 13.927 y el reglamento 523/09, son fijados a partir del precio de la nafta de mayor octanaje. Cada infracción de tránsito tiene asignado una cantidad de unidades fijas (UF) en función del precio de la nafta determinado por el Automóvil Club Argentino, que en febrero de 2022 quedó actualizado a $123,40 por cada UF.
Por ejemplo, frenar sobre la línea peatonal o invadir la línea de frenado implica multas que van desde 50 a 100 UF, es decir, de $6.170 a $12.340. Se trata, en este caso, de la infracción más baja.
En tanto, la multa por exceder los límites de velocidad permitidos va desde 150 a 1000 UF, es decir, entre $18.510 y $123.400.
A su vez, la multa por cruzar un semáforo en rojo es la más elevada: contempla el pago de 300 a 1000 UF, lo que representa entre $37.020 y $123.400.
Por supuesto, en caso de que el valor del combustible siga elevándose, el monto de las multas acompañará el incremento.
Vale aclarar que serán los jueces de falta municipales quienes, de acuerdo a las características particulares de cada infracción cometida y detectada por el sistema de fotomultas, determinarán el valor final de la multa que deberá abonarse.