Ciudad
Comienza a salir a la luz la persecución al juez de Familia Nro. 4 Facundo Dominoni
A raíz de una investigación y aportes documentados de miembros del Poder Judicial
A raíz de una investigación y aportes documentados de miembros del Poder Judicial
La Asociación Judicial Bonaerense (AJB) que nuclea a los trabajadores del Poder Judicial está viviendo horas de mucha crítica por parte de sus afiliados a raíz de una serie de acciones que no representan la ideología de los trabajadores.
De hecho, el número de afiliados a la AJB se encuentra en un marcado descenso. Desde su creación, las cifras representan una de las más bajas más históricas y alarmantes de afiliados.
Los últimos años, desde que la lista Anaranjada asumió la conducción del gremio, se han intensificado protestas, escraches y persecuciones -realmente preocupantes- de sus dirigentes contra los funcionarios y magistrados.
Uno de los casos más resonantes fueron las acusaciones contra el actual camarista Rodrigo Cataldo y actual presidente del Colegio de Funcionarios y Magistrados de Mar del Plata.
El juez Cataldo, recibió un sinfín de presentaciones de la AJB en su contra, para privarlo de asumir el cargo que ahora ocupa en la Cámara de Apelaciones. Sin embargo, y pese a los constantes escraches, ello no impidió que el Consejo de la Magistratura lo posicionara en rol que actualmente ocupa.
Algo similar está sucediendo contra el juez Juan Facundo Dominoni, a cargo del Juzgado de Familia Nro. 4 de la ciudad.
Para ello utilizan una matriz repetida y caduca: lo denuncian por violencia de género, lo mismo que hicieron –sin éxito- contra el Dr. Cataldo.
Las denuncias contra el juez Dominoni principian del año 2016 y pese a que el magistrado cuenta con un concepto de honradez entre sus pares y colegas, desde la AJB insisten en acusarlo a diestra y siniestra. Pareciere ser, entonces, que no estamos frente a un caso de violencia laboral, sino en una persecución de contenido político, atentando contra la libertad laboral de los magistrados.
Caso Alejandra Germinario
El último caso a salir a la luz, fue el de Alejandra Germinario. Si bien la funcionaria ya había sido cuestionada en su labor como subsecretaria de Protección y Promoción de Derechos del Niño, ahora pareciera que ocupa el lugar de victimaria a víctima.
En una publicación efectuada por el portal Noticias y Protagonistas del año 2014, una abogada de familia denunciaba a la Dra. Germinario por su trabajo y falta de compromiso en su función.
La abogada Dra, Hooft, en el 2016, criticó severamente el accionar de Germinario en un resonante caso resuelto por el propio Dominoni y confirmado por la Cámara de Apelaciones.
Y se dejaba entrever ya por entonces, el malestar de sus compañeros de trabajo que tendrían intenciones de llevar sus quejas por sus malostratos quienes le habrían hecho saber los derechos laborales y humanos por representantes de ATE debido a maltrato contra agentes a su cargo.
Según trascendió, avalada por la AJB la Dra. Germinario presentó una denuncia por violencia laboral y solicitó el cambio de funciones dentro del Poder Judicial.
Sin embargo, los propios integrantes del Juzgado de Familia Nro. 4 se habrían ofrecido como testigos para declarar en el sumario y poner de resalto que, en realidad, podría ser la propia Germinario quien maltrataba a sus compañeros, a punto tal, de pedir el cambio de su oficina por no soportar el sonido del celular de dos de sus compañeras de labor.
Asimismo, trascendió, que las quejas habrían llegado por parte de los abogados del fuero, quienes se habrían quejado por sus respuestas erróneas o equivocadas; y en definitiva pedían la atención de otro secretario que no fuera ella. Trascendió que fue la propia Germinario quien solicitó no atender más a letrados o abogados.
Más allá de ello, parecería ser que próximamente va a haber novedades reveladoras respecto de una serie de presentaciones que se harían ante la Suprema Corte de Justicia de la Provincia. En ellas, se pondría en resalto, algunas actitudes de la funcionaria Germinario que irían a contramano de su denuncia y que podrían dar un vuelco a las acusaciones infundadas de la AJB – una vez más-. De hecho, existen pruebas que sorprenden a Alejandra Germinario participando de un escrache en horario laboral, contra el actual camarista Cataldo.
Y si bien el gremio es el primero en enrolarse detrás de cualquier reclamo de un empleado judicial, nada dijo la AJB cuando una jueza subrogante Meregoni y cubriendo la licencia de Dominoni del mismo Juzgado de Familia Nro. 4, intentó sorprendentemente frenar el ascenso de una empleada de carrera, para que una familiar de la magistrada ocupara su lugar.
Pero las denuncias de la AJB no terminan ni en Cataldo ni en Dominoni.
En el año 2016 el gremio de los judiciales avaló la denuncia de un empleado que había manifestado lesiones tras caerse un ascensor en mal estado. Sin embargo, las pericias efectuadas inmediatamente después por la Corte y la propia empresa de seguridad, concluyeron que no había sucedido tal episodio y que la denuncia era falsa.
Algunos compañeros del denunciante habrían dejado filtrar el dato que, en verdad, la lesión que acusaba, fue provocada durante un partido de karate.
La propia secretaria del Juzgado de Familia Nro. 1, Dra. Paula Ragonese, concluyó que no registraron ningún incidente con un ascensor. Ello hizo cuestionar severamente la denuncia de la AJB.
Por último, en el portal de contenidos Noticias Mar del Plata, se denunció a la Lic. Micaela Bozano quien pidió un sinfín de licencias por el fallecimiento de un familiar, cuando en realidad estaba en plena campaña política para ser elegida como integrante de la actual conducción del gremio.
El caso Bozano fue duramente cuestionado por sus propios compañeros y derivó en el traslado de la psicóloga a otra área. Actualmente, es el único caso de una perito psicóloga que solicitó a través de la AJB que no se le asignaran casos referidos a salud mental. Inéditamente sigue percibiendo sus haberes como perito sicóloga.
Todas estas cuestiones, sumado a la pérdida de credibilidad del gremio, hacen replantearse y revisar muchas de las denuncias efectuadas. Un tema tan serio debe tratarse con la seriedad que merece.
Pese a ello, la documentación a la que tuvimos acceso hacen aventurar que las denuncias contra el Juez Facundo Dominoni podrían etiquetarse como parte de una persecución sin fundamento y que afectan la honradez y la profesionalidad con la que desempeña sus funciones como titular del Juzgado de Familia Nro. 4.
Muchisimos abogados, colegas, funcionarios y empleados han manifestado su apoyo y solidaridad al magistrado, abogando por el definitivo esclarecimiento de los hechos, con la verdad y el respecto que un juez se merece.