Ciudad
Movilización en Tribunales por caso de gatillo fácil
Así lo sostuvo Marisa, hermana de Mauricio Araujo, el joven de 20 años presuntamente asesinado por la policía en diciembre del 2012.
Así lo sostuvo Marisa, hermana de Mauricio Araujo, el joven de 20 años presuntamente asesinado por la policía en diciembre del 2012.
Un 23 de diciembre del 2012 Mauricio Araujo (20) murió en un supuesto enfrentamiento con la policía a metros de la esquina de Formosa y 20 de septiembre. La firme defensa de la familia de la víctima, que no dudaba que era un caso de gatillo fácil recién se plasmó el pasado 24 de noviembre, cuando el policía Rodolfo Lorenzo fue imputado por “homicidio calificado”. Este lunes debió prestar declaración en Tribunales.
En la puerta de la sede judicial de Tucumán y Brown, Marisa Araujo, hermana de Mauricio, pidió que el policía imputado por el crimen “diga la verdad” y remarcó el pedido de la familia a que se llegue a la verdad: “Hace 6 años que estamos luchando no solo contra la policía sino contra la justicia”.
“Lo que armaron en ese momento ya se les cayó, duró lo que tuvo que durar, con personas que los apañaron. Con las pruebas en la mesa, a nadie le alcanzaba. Era presentar pruebas y pedir y pedir y nada. Esto pasó por cinco fiscales, dos pedidos de sobreseimiento, dos rechazos de sobreseimiento por el fiscal Bombini y los fiscales generales. Pedimos justicia y que paguen los que hicieron porque fue una ejecución con total maldad”, sostuvo Marisa
La mujer recordó que aquella noche del 23 de diciembre, Mauricio volvía de bailar junto a su primo y un amigo, cuando se les quedó el auto en Formosa y 20 de septiembre.
“Como se les queda el auto, tratan de llamar por teléfono y van al `Sochori de Dorapa´ (en Juan B.Justo y Dorrego). Cuando están volviendo al auto, llega la policía de civil y patrulleros. Un policía se queda dentro del vehículo, amenazando al chico que estaba en el auto. Cuando llegan Mauricio y mi primo, el policía sale del auto de ellos, tira un tiro al aire y da la voz de alto: los chicos se quedan quietos y el policía le da un tiro en el brazo a Mauricio. Él empieza a los gritos, le dicen que se calle pero seguía gritando de dolor. Le da un culatazo y como no reacciona, el otro policía le dice que `lo bajara porque no servía más´. Le pone un arma al lado, para justificar el enfrentamiento. Incluso los policías no tienen pólvora y Mauricio si, en las dos manos”, relató con dolor.
Por otra Marisa habló de las desinteligencias de la autopsia: “Negaron el culatazo que tenía en la cabeza y cuando (el fiscal) Lódola agarra la causa después de (la fiscal) Sánchez, las peritos forenses reconocen el culatazo y nos piden disculpas porque `se les pasó por alto´. Y así un montón de cosas que estaban y fueron saliendo de a poco”.
En relación al nuevo reglamento del uso de armas implementado por la ministro Patricia Bullrich, Marisa Araujo sostuvo que “la justicia esta para impartir justicia, porque un policía no puede matar porque tiene cara sospechosa, por estar con visera y ser un pibe de barrio y ejecutarlo y andar como si nada”.
“Si hizo mal las cosas, lo tiene que pagar como cualquiera. A nosotros nos toca de cerca porque nos pasó. Las personas que comentan y festejan que se asesinan chicos, es porque no les pasó. Es una matanza la que se va a hacer”, cuestionó.