Leandro Furundarena es el referente de los trabajadores del centro comercial de la calle San Juan, que en mayo del 2020, en pleno Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, fueron los primeros en reclamar la reapertura de los negocios y en reunirse con el intendente de General Pueyrredón, al que le dijeron: “Guillermo, nosotros vamos a trabajar, vamos abrir”.

“La pandemia me hizo dar cuenta que la política se metió con todo lo que hacía, con mis amistades, con mi trabajo y hasta con lo que podía o no hacer”, expresó Leandro Furundarena, consultor jurídico que asesoró a sus pares de la zona comercial, donde atiende una relojería junto a su familia.

— En diciembre te incorporas al equipo de Guillermo Montenegro ¿Qué rol vas a cumplir dentro del gobierno?

— Colaborar en el poder Ejecutivo o Legislativo, aún no lo decidimos. Les dije que acá tienen un espadachín, con el que pueden contar para lo que necesiten. Mar del Plata involucionó con el paso de los años, debe apuntar a tener turismo todo el año, con el fin de incentivar el consumo para aumentar la recaudación, sin tener que recurrir a la suba de impuestos. Esta política debe estar acompañada por un programa criminal, que le brinde seguridad a la gente, que sepan que si deciden vacacionar en nuestra ciudad, se los va a resguardar no solo en materia de seguridad, sino también, en cuanto a derechos.

— ¿Qué opinión te merece el juicio por jurados?

— No creo que la sociedad argentina esté preparada para afrontar un juicio por jurados. Las personas están muy cansadas de la inseguridad y de las injusticias, lo que provoca que no sean objetivos al momento de juzgar. Condenarían a todo el mundo, aunque no sería malo, ayudaría en materia de seguridad. Yo estoy a favor de una política de mano dura como la que implementó Rudy Giuliani, ex alcalde de Nueva York. Es necesario que haya una política criminal más severa, que condene los delitos menores y los excarcelables.

— ¿Estás a favor de bajar la edad de imputabilidad?

— Sí, claro que sí. Paradójicamente, una persona de 16 años es inimputable, pero tiene derecho a votar. Cuando a los 12 años se puede discernir entre lo que está bien y lo que está mal. Tranquilamente un equipo especializado puede atestiguar si el imputado comprendió o no la criminalidad del acto. Muchos menores delinquen porque la ley no los afecta. Por eso, es necesario bajar la edad de inimputabilidad a 14 años. Si alguien comete un daño, tiene el deber de responder por eso.

— ¿Qué representa Javier Milei en la juventud?

— La esperanza para los descreídos en la política. Una voz como la de Milei, que va en contra del sistema ortodoxo, es necesaria dentro del Congreso, porque representa la angustia y la bronca de la gente que no llega a fin de mes, a causa de una moneda que se devalúa por impuestos altísimos. Pero su estilo e impronta, hace que no llegue a toda la sociedad. Un gran sector prefiere a personas como López Murphy, que pregona los mismos ideales pero con un perfil moderado.

Es impostergable que todos los ciudadanos y las ciudadanas abandonen la pasividad y se comprometan a actuar frente a las demandas no satisfechas. Que las manifestaciones de hartazgo que se vuelcan en las calles se traduzcan en iniciativas populares, agrupaciones y/o mecanismos que pongan a derecho lo que el Estado nacional no representa ni garantiza. Que no gane el: “Yo, argentino”, porque la apolítica conlleva a dejar el poder en manos del mismo círculo gobernante.