Dos veterinarios, uno de cada una de las instituciones, acompañaron al animal en el vuelo para asegurar un monitoreo permanente ante cualquier eventualidad.
"Fue un éxito", aseguraron, muy felices al arribar al aeropuerto Ástor Piazzolla y mucho más cuando vieron que este ejemplar macho de tortuga marina se sumergió en el piletón de más de 1.2 milllones de litros de agua de mar.
Los especialistas aseguran que todo salió tal cual se había planificado y ahora están a la espera de resultados de algunos estudios que le realizaron a Jorge a poco de llegar, a efectos de conocer su condición en este punto de partida de una nueva etapa para su vida, ahora más cerca del mar.
