Dos guardavidas de Cariló rescataron este martes a la mañana a una ballena que había quedado varada cerca de la orilla, en el balneario Hemingway. Tras el esfuerzo, la paciencia y la colaboración de los trabajadores, el animal pudo volver a la profundidad del mar.

“Estaba a unos 150 metros de nuestro puesto. Era una ballena de aleta corta, de unos ocho metros y era gigante, como un vagón de tren”, contó Gustavo Ehlke, uno de los dos guardavidas, a Ahora. “Estaba en una bajante y cuando llamamos a una ONG de Pinamar nos orientaron y nos dijeron que estuviera siempre mojada y no quedara boca arriba”, agregó.

Ehlke trabaja hace 20 años en el balneario y señaló que nunca había vivido una situación similar. “Hubo que girarla hacia el sur, sin tocarla, aplaudíamos en el agua y tratamos de que se fuera corriendo. Tratábamos que girara, porque nosotros solos no podíamos hacerlo, pero la fuimos orientando”, destacó.

“Cuando pasamos a una zona donde no hacíamos pie – continuó– y sabíamos que si seguíamos no podíamos volver para atrás, nos pusimos uno al lado del otro y cuando ella podía tomar fuerza, ayudada por las olas, empezamos a golpear el agua y vimos que arrancó y agarró profundidad”.